Introducción
Cuidado y mantenimiento
de la salud.
La higiene personal es muy
básico en el aseo, limpieza y cuidado de nuestro cuerpo.
Es importante de nuestra
vida, la higiene personal no es sólo tener el pelo bien peinado y cepillarse
los dientes; también es importante para la salud y la seguridad de los
trabajadores en su sitio de trabajo.
Los trabajadores que
prestan atención a la higiene personal pueden prevenir la propagación de gérmenes
y enfermedades, también reduce la exposición a productos químicos y
contaminantes, y evitar el desarrollo de alergias, trastornos de la piel y
sensibilidad a sustancias químicas.
Cabello
El cabello debe
mantenerse limpio. Cada persona deberá lavarse el cabello con la frecuencia
necesaria para conservarlo limpio, lo cual varía según el tipo de cabello que
tenga (graso, seco...). Algunas personas, fundamentalmente las que tienen
cabello graso, pueden necesitar lavarlo todos los días; no existe ninguna
contraindicación para ello.
Se deberá peinarse todos
los días y no hay que presentarse nunca ante quien sea con los cabellos
desordenados y desaliñados. Téngase sobre todo cuidado de que no tengan
parásitos ni piojos.
El cabello será cubierto
por una malla para mantenerse lejos de productos o alimento que puedan
contaminarse.
Manos
Según
la OMS, las manos son la "forma más común de mover los microorganismos de
un lugar a otro". Por tanto, el lavado de manos es una de las premisas más
importantes "para mantener los alimentos seguros".
Cuándo lavarse las manos
Lávese las manos con agua corriente limpia y jabón:
- Antes,
durante y después de preparar alimentos.
- Antes
de comer alimentos.
- Después
de usar el baño.
- Después
de cambiarle los pañales a un niño o después de limpiar a un niño que
acaba de ir al baño.
- Antes
y después de atender a alguien que esté enfermo.
- Después
de soplarse la nariz, toser o estornudar.
- Después
de tocar a un animal o sus excrementos.
- Después
de tocar desperdicios.
- Antes
y después de tratar una cortadura o herida.
PIEL
La
piel es una de las principales barreras defensivas del organismo frente a las
infecciones y otras agresiones externas. Es, además, un importante órgano de
relación para el ser humano, ya que en ella se alberga el sentido del
tacto.
Para mantener una correcta higiene de la piel es preferible el hábito de la ducha frente al baño. La ducha debe realizarse diariamente o, al menos, tres veces por semana. De esta forma se favorece la transpiración y se minimiza el riesgo de padecer determinadas enfermedades dermatológicas, fundamentalmente las de origen infeccioso.
Para mantener una correcta higiene de la piel es preferible el hábito de la ducha frente al baño. La ducha debe realizarse diariamente o, al menos, tres veces por semana. De esta forma se favorece la transpiración y se minimiza el riesgo de padecer determinadas enfermedades dermatológicas, fundamentalmente las de origen infeccioso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario